Además de estudios previos referidos a fauna y flora, los Estudios de Impacto Ambiental que elaboramos han de cubrir y analizar el aspecto arqueológico.
Las obras y cambios de uso de suelo, no solo afectan al hábitat natural, también pueden comprometer el patrimonio arqueológico o incluso paleontológico. Por ello de forma previa, y como apartado específico del EIA, es necesario hacer una ESTUDIO ARQUEOLÓGICO DE LOS BIENES PATRIMONIALES PRESENTES.
Adicionalmente, en las obras, hacemos labores de Vigilancia Arqueológica o Paleontológica durante los movimientos de tierras, mediante la presencia directa, diaria y permanente de un arqueólogo o paleontólogo expresamente autorizado a pie de obra.