En estos momentos y a lo largo de consiguientes meses estaremos realizando el estudio de aves en una superficie equivalente de casi 1.000 ha, en donde se prevé instalar una PLANTA DE HIDRÓGENO VERDE (la energía para la electrólisis, proviene del sol).
Estas plantas de generación energética son clave para el cumplimiento de las metas de descarbonización de nuestra sociedad, teniendo el hidrógeno verde numerosas ventajas por su fácil aplicación industrial.
La compatibilización de la biodiversidad con estas instalaciones es la clave para que logremos cumplir con ambas estrategias europeas (sobre la Biodiversidad y sobre el Clima) y hay que trabajar hasta conseguir dicho equilibrio. Para ello, es imprescindible el estudio previo de las especies que habitan en esos lugares, en este caso, avifauna, cuyo hábitat se verá alterado por la ocupación física del territorio por placas solares fotovoltaicas.
Estudios como este han de revelar qué especies utilizan esta superficie como área de campeo, reproducción, dispersión o migración, y qué incidencia se prevé que tenga la implantación de la planta en su dinámica poblacional y área de distribución a corto, medio y largo plazo, al objeto de evaluar alternativas, medidas compensatorias o medidas correctoras que minimicen su impacto.
